A 25ºC en verano, más del 90% de la población encuentran el confort térmico. Eso sí, con solo cambiar la temperatura un par de grados la curva de la satisfacción del aire acondicionado cae significativamente y la vestimenta tiene mucho que ver.

Este verano hay una cosa clara, aunque también haya las dudas de siempre. Lo importante es que todo el mundo debe saber que la hora más barata para poner el aire acondicionado son las centrales del día. Es decir, las más calurosas así que, ¡buenas noticias! Eso sí, solo para los que tengan tarifas variables para aprovechar estos momentos de bajos precios. Más incluso que a las 3 de la mañana que tradicionalmente siempre ha sido la más económica. La razón es muy sencilla los momentos con las temperaturas más altas son también las de mayor producción fotovoltaica. Ya se sabe… el sol en verano no solo sirve para broncearse, siempre usando protección para los rayos UV, sino también para producir electricidad. Cada vez más y en días soleados se nota su efecto en los recibos.

Vestimenta y curva de la satisfacción del aire acondicionado

Vestimenta y curva de la satisfacción del aire acondicionado- Julia en la Onda de Onda Cero (28 de junio de 2023).

Resuelta la duda de la hora, la que queda siempre pendiente es la de la temperatura. ¿Cuál es la más adecuada? ¿Ha cambiado respecto al año pasado? El último verano con el comienzo de la guerra de Ucrania y los recibos de la luz más altos de la historia… la recomendación oficial era de 27ºC. 365 días después la cosa ha cambiado, aunque la crisis energética continua de forma más moderada. Por eso, quizá este año hay quien piense que la puede rebajar un poco más. Así, tal y como ha explicado Jorge Morales de Labra en Julia en la Onda de Onda Cero, 26ºC o como máximo 25ºC es más que suficiente. En invierno con 21ºC también basta, pero no es por casualidad ni por capricho de nadie, sino que hay estudios detrás. Los datos lo confirman. Está todo calculado y se realizan las llamadas curvas de satisfacción.

Completas encuestas con amplias muestras de personas a las que se les pregunta, sin que sepan la temperatura a la que se encuentran, si están cómodos. A los niveles anteriormente citados el 90% disfruta de un confort térmico razonable. No sienten ni frio ni tampoco calor. Vamos, que están a gusto. Eso sí, se cambia el termostato solo un par de grados hacia arriba o hacia abajo… el porcentaje de insatisfechos aumenta de forma considerable.

También hay que tener en cuenta que hay mucha disparidad en cuanto al vestuario. Solo hay que ir al cine o a un restaurante para comprobarlo. La temperatura probablemente la escogen pensando más en personas que van con traje y en muchas ocasiones corbata que en las que visten de forma un poco más informal. En realidad, más adecuada para esta época del año. Así, mientras unos están confortables con la doble manga de la camisa y la americana otros pasan un frío de… Eso sí, si se sube un par de grados en el termostato la cosa cambia. Los primeros se ponen a sudar y los segundos más satisfechos. Complicado porque en realidad de lo que se trata es de un tema social, de convencionalismos. Por ejemplo, esto ya en pocas oficinas pasa. Ya no suele ser obligatorio una vestimenta tan formal.

Vestimenta y curva de la satisfacción del aire acondicionado- Julia en la Onda de Onda Cero (28 de junio de 2023).

Vestimenta y curva de la satisfacción del aire acondicionado- Julia en la Onda de Onda Cero (28 de junio de 2023).

En verano se pueden tomar ciertas licencias y de esto hay que concienciarse para poder unificar las temperaturas. Sobre todo, en un país como España sometido a intensas olas de calor. Es inadmisible la etiqueta. No debería pasar, pero aún hay lugares en los que su ausencia es considerada como una falta de educación y respeto. Sin embargo, del mismo modo que con 42ºC a nadie se le pasaría por la cabeza comer un cocido con su sopa bien calentita, lo de la corbata tampoco es admisible.