Consecuencias físicas y económicas… las olas de calor y las altas temperaturas reducen la productividad, modifican los hábitos alimentarios y afectan a la economía. También aumentan el consumo de energía y se gasta más en electricidad.
Los que tienen tarifas variables este verano cuentan con una gran ventaja cuando tengan que encender el aire acondicionado. Precio de la luz imbatible en las horas más calurosas, pero hay algunas cosas que cambian al utilizarlo.
Gas de 300 euros/MWh poco más de 30 en menos de un año y eso se nota en los recibos si se tiene una tarifa variable. Ya notan la bajada quienes la tienen, pero… ¿Seguirá siendo el precio de la luz inestable?
La estabilidad en el sector eléctrico, y en general en el energético, tiene un precio. En 9 de los últimos 10 años las tarifas variables como el PVPC o la Cristalina han sido más baratas que la mejor de las ofertas fijas.
Consumo prácticamente inapreciable. Menos de un euro al mes, pero hay que tener en cuenta que no enfría el aire. Tan solo mejora la sensación térmica que es muy diferente. Entonces, ¿ventiladores o aire acondicionado?
Ahora la mejor opción son las tarifas variables para beneficiarse de los bajos precios en las horas centrales del día. Eso sí, sin permanencia ir viendo la evolución y poder tomar decisiones si cambia la situación.
¿Son buenas noticias para el consumidor el cambio del PVPC? ¿Será la solución definitiva a los elevados recibos o, por el contrario, otra vez más no servirá para nada? Diferentes visiones de la nueva tarifa regulada que dejará de ser variable.
Si durante el pasado año solo se pudieron aprovechar del ahorro de la excepción ibérica los que tenían una tarifa variable ahora que la renovables han hundido el precio de la luz pasa lo mismo. Otra razón más para elegirlas.
Cambia la tarifa oficial. El nuevo PVPC dejará de ser la modalidad variable por excelencia, para convertirse en híbrida. Más estabilidad en las facturas, pero difícil que mantenga los bajos precios actuales.
El fin de los combustibles fósiles está cada vez más cerca. La descarbonización de la economía y el impulso a la renovables se nota ya en los recibos y más que lo irá haciendo. Eso sí, siempre que se tenga una tarifa variable.
