Miedo a lo desconocido. Las dudas sobre la autonomía, la red de carga, el precio y también la crisis energética son algunos de los frenos al coche eléctrico que impiden que ni termine de arrancar, aunque ya son presente y, sobre todo, futuro.
El impulso que la electromovilidad necesitaba para alcanzar la meta. Deducción de hasta 3.000 euros en el IRPF para todos aquellos que compren un coche eléctrico o instalen un punto de recarga, pero… ¿es mejor así que con subvenciones?
Más caros, pero hay subvenciones e importante ahorro en combustible; escasa red de carga, pero mayor autonomía; información más accesible… las principales contras del coche eléctrico ya no lo son tanto.
El Plan MOVES III de movilidad sostenible trae ayudas muy importantes para el coche eléctrico. Hasta 7.000 euros de ahorro si se aporta otro de más de 7 años para achatarrar.
No es que tengan truco, ni que no sea oro todo lo que reluce, pero las subvenciones al coche eléctrico tienen también su letra pequeña que hay que tener en cuenta.
Autonomía, vida útil, costes, modos y tiempos de carga, … y es que el 99% de las dudas que aún despierta el coche eléctrico tienen que ver, precisamente, con la batería.
Quienes estén pensando en comprar un coche eléctrico están un paso más cerca. No solo los números salen, sino que además hay nuevas subvenciones que los hacen más rentables que los de combustión.
Motivaciones para pasarse al coche eléctrico las hay y muchas. Tantas como subvenciones. Pues ahora hay ya 3.750 millones de razones más.
