Árboles, bolas, espumillones, calcetines gigantes y todo tipo de adornos, las figuras del Belén y, sobre todo, las luminosas guirnaldas. Sin embargo, antes de encenderlas, hay que saber elegir las luces de Navidad más adecuadas.
Ni un árbol sin estrella ni luces de Navidad. La cosa está complicada con los precios por las nubes. El precio de la electricidad y la elevada inflación harán que la cena de Nochebuena o la comida de Navidad sean más caras de lo que le gustaría a la mayoría. Sin embargo, hay ciertos elementos que no deben faltar nunca y, a pesar de todo, este año no hace falta renunciar a la tradicional iluminación navideña. No es necesario, ni en las calles y tampoco en todas y cada una de las casas. Eso sí, la clave es que sean LED o funcionen con pilas o con cargadores solares. Es importante porque gastan hasta 7 veces menos que las de toda la vida. Opciones más eficientes y rentables porque si se enciende una guirnalda desde el 1 de diciembre al 8 de enero, sin parar ni un solo momento…
¡El coste no llegaría a los dos euros! Y es que no son pocos los que este año se están planteando celebrar una Navidad un poco diferente, pero sin renunciar a la magia de las fiestas. Entre las alternativas suenan, y mucho, los árboles de fieltro y las luces con pilas. Sencillamente porque son más baratas. Lo que sea para que en ningún caso se renuncie a la magia de la Navidad, aunque se tenga un presupuesto ajustado y haya que mirar más los bolsillos. Menos de 2 euros para el mes y medio que van a estar encendidas por cada guirnalda de 100 bombillas siempre que cumplan con las características anteriores. Una solución más que razonable y que está bien pensada. Por tanto, la elección de las luces depende y mucho del número de horas que vayan a ser utilizadas.
Así, si nada más que se van a usar un rato por las noches o en momentos concretos de alguna de las muchas celebraciones que están por venir… probablemente también la opción de las pilas sea la más recomendable y económica.
No hay duda. Las luces ayudan a atraer la magia y el tiempo marca la elección. Pocas horas, pilas. Ahora bien, si lo que se quiere es una iluminación a lo grande, luces 24/7 desde ahora hasta después de que vengan los Reyes Magos… lo mejor son cordones o hilos de luz, las típicas guirnaldas de decorativas o las cortinas, que son las más vistosas y las que más gustan. Por eso, lo más importante de todo es tirar cuánto antes las lámparas antiguas. No hay que esperar a que se estropeen y comprar ya mismo otras de tecnología LED. Tal y como ha explicado Jorge Morales de Labra en La Sexta Noticias, las viejas consumen hasta 7 veces más y a los precios que sigue estando la electricidad la diferencia puede ser enorme. Los números salen a la perfección.
De 1,9 euros a más de 14 por cada juego de luces y eso si estuviera encendida toda la Navidad. A quien no le convenza todavía, aún está la alternativa solar. Si no les convence todavía. Muy indicadas para exteriores porque si se habla de consumo y ahorro energético, pero también de sostenibilidad, la solución sería esta. Eso sí, teniendo en cuenta una particularidad. En este tipo de guirnaldas la intensidad lumínica y la duración puede ser inferior. Dependen de la luz que reciban durante el día para cargar la batería. Además, su demanda es cada vez mayor y empiezan a ser difíciles de encontrar. Están volando de los expositores de las tiendas como el trineo de papa Noel… Algo más caras y, sin embargo, ya están en la lista de favoritos de la mayoría… Pilas, eléctricas o solares, pero que no falten nunca las luces de Navidad.